Billetera o puñalada

1 junio, 201520 enero, 2016 Alfredo Reyes

Hay frases célebres que nos endilgan desde chamacos en la escuela y, ¡ay de aquel que no se las aprendiera! porque seguramente se quedaría sin recreo y con doble tarea por burrote; frases que se vuelven –a fuerza de ser repetidas miles y miles de veces-, una verdad irrebatible y una ley de vida, como la famosa “El respeto al derecho ajeno es la paz” o “Si hubiera parque no estarían aquí bolseándonos” o “Ay mamá los de la luz” o “Antes de salir a jugar, levanta tu tiradero”, aunque no todas se inculcaran propiamente en el salón de clases.

El Cruce, Ed. Oveja Negra, 2008 –Banda de Chile-

Buenas tardes, lo quería saludar.
Le presento a mi cuchillo,
lo vinimos a asaltar.
Hace rato que lo observo,
y no es nada personal.
Usted sabe, la cosa esta mala
y no quiero trabajar.

Muchos de nosotros fuimos educados a base de borradorazos certeros por profesores sin evaluar, y que contaban con la aprobación e indulgencia de los padres de familia, que por aquellos años ni idea tenían de los derechos de la niñez ni tanto embrollo leguleyo moderno.

Sobra decir que no todos los adultos de hoy fuimos alumnos de escuela pública, y que el sistema Montessori hizo de las suyas en futuras figuras de la “polaca mexican curious”, ejemplos los hay y de sobra, basta ver cuánto cochinero dejan los que se van y que creen que así, sin chistar, los que llegan estarán obligados a levantar, si es que quieren encontrar el escritorio o la silla desde donde despacharán.

En abril del año pasado, (véase Cultura Blues No.35), en mi columna “Línea A-Dorada, El Blues del Tren”, comentábamos acerca de trenes que se aceleran antes de tiempo y que sin lugar a dudas ponen en riesgo la integridad de proyectos mayores o de alcances diferentes, a estas alturas querido lectora o lector dirás… ¿Y qué con eso?, pues nada, que aún faltan trapos sucios por salir y habrá “harto que lavar”, todo esto derivado de la incompatibilidad de un tren.

Denuncias videograbadas en las que se señalan las fallas en el mantenimiento del Sistema de Transporte Colectivo Metro, o que señalan la colusión entre vagoneros y autoridades, o que señalan errores en la aplicación del alcoholímetro a los conductores de los trenes, problemas en la radiocomunicación y señalización del sistema, y que por una u otra causa propician alcances como el ocurrido el pasado 4 de mayo del 2015 en la estación Oceanía, y que con ojo pericial su divino-director dictaminó, a “ojo de buen cubero”, que el accidente lo ocasionó una granizada atípica, así nomás porque él lo dice, aunque la versión oficial sea dada a conocer diez días después del incidente que le costó la vida a un trabajador del metro y dejó a varias personas heridas.

“Affaires” en donde se ven involucradas ciertas propiedades en ciertas zonas de muy alta plusvalía en la ciudad, ya sea en Las Lomas o en La Roma, y que hoy por hoy salen a la luz pública de la mano de ciertos emberrinchamientos de algunos de los que se fueron por obtener fuero a costa de lo que sea, situaciones que seguramente no estaríamos viendo si los que se fueron hubieran aplicado la frase célebre de “Levanta tu cochinero antes de salir a jugar”, ¿no creen?

Las campañas entran a su fase más riesgosa , podemos ver gracias a la magia de internet enfrentamientos a garrotazos en Cuajimalpa, patizas en Querétaro, balaceras en Yurécuaro, desgreñadas en la Gustavo A. Madero, denuncias por “Chicanadas” ante el INE, (¿Qué culpa tienen los Chicanos?), solicitud de sacar del juego al niño que no obedece porque se siente protegido por su hermano el gandalla mayor, diputados dando cabezazos descontoneros, candidatas manejando ebrias y muchas, muchas lindezas que aún nos falta por ver, yo por lo pronto no pretendo viajar en metro por un buen rato y todo… ¡Por Seguridad de los Usurios!

¡Billetera o puñalada! ¡Billetera o puñalada!
¡Billetera o puñalada! ¡Billetera o puñalada!
¡Billetera o puñalada! ¡Billetera o puñalada! ¡Billetera o puñalada

Billetera o puñalada: