Sesiones Desde la Cabina

Nación Blues, nuevo disco de Real de Catorce

José Cruz está de vuelta

Desde el 2005 que se le diagnosticó esclerosis múltiple, José Cruz Camargo Zurita no ha vivido días fáciles, y por el contrario, con el paso del tiempo su enfermedad se ha ensañado con él. Sin embargo, pese a los nubarrones, las tormentas -y no necesariamente siempre de salud-, ha logrado ganar una batalla tras otra, una a la vez -como dirían Lennon y McCartney, con una pequeña ayuda de sus amigos, compañeros, seguidores, pero principalmente de su familia, Mary y Paty.

El inicio de este 2016, a 11 años del diagnóstico, tampoco fue fácil para José, una fuerte recaída lo tuvo fuera de circulación los primeros meses, esta batalla también la ganó, pero retrasó la producción del más reciente disco de Real de Catorce: Nación Blues, álbum que fue grabado desde 2015, pero que finalmente, para beneplácito de sus seguidores, verá la luz este mes, a través de diferentes plataformas digitales y por supuesto de manera física.

Entre marzo y septiembre de 2014 José Luis García Fernández hizo un amplio y detallado recorrido por la discografía de la legendaria banda de blues -conformada en 1985 por José Cruz, Fernando Ábrego, José Iglesias y Severo Viñas-, en donde además de los datos de edición, se pueden consultar las letras de las canciones de cada uno de los discos. Hasta el 2013, con Una razón para vivir, el grupo contabilizaba 10 discos de estudio, dos en vivo y un recopilatorio.

Nación Blues se convierte en el décimo primer disco de estudio de Real de Catorce, sin contar Azul y Al Rojo -emblemáticos discos grabados en vivo durante un concierto en 1997 en Rockotitlán-, en él encontramos las temáticas que han estado presentes en la mente, la lírica y preocupación de José Cruz a lo largo de sus más de 30 años de trayectoria, como lo social, lo político, el amor, la pareja.

Para muestra el primer track, Chansón (a Peña), en donde los mismo están presentes Ayotzinapa, Atenco, la violencia en la que está sumergido el país, y que además cuenta con el spokenword de Oscar Molina Luna.

Otro elemento que destaca de este disco, es la incorporación de lleno de una voz principal adicional a de José. En la mayor parte de la discografía de la banda, será difícil encontrar alguien distinto a José que lleve la voz principal. En esta ocasión Real de Catorce, cuenta con la voz de María Camargo, su hija, que más allá del nepotismo que puedan pensar, hace gala de una madurez vocal que sorprende para bien. Con un estilo y personalidad propia, María se desliza sin problema en los coros de todo el disco e interpreta de manera precisa y con soltura los temas Demonios de sal, El Hambre y El beso.

Nación Blues, que será presentado en la Carpa Astros con un concierto el 10 de septiembre, significa para José Cruz uno de sus mejores trabajos, un parteaguas en la agrupación. Aquí nos habla directo y sin contemplaciones. “…el país es una tumba / y también mi corazón, / el país es una fosa / y también mi corazón, / el país es una mierda / y también mi corazón…”, canta en Tabacos de Amor; o en Blues del deportado, “¡Ay! este blues deportado / sagrado y maldito. / Pide perdón a la tierra / no traigas la guerra / no siembres dolor”. En cada uno de los temas encontramos letras que nos llevan a reflexionar sobre nuestro país, nuestro gobierno, sobre nuestra relación con nosotros mismos.

Desde hace algunos años, la banda ha mantenido una estabilidad en su alineación, con Alan López Saldaña, en la batería; Arturo Waldo, en la guitarra, Miguel Korsa, en la guitarra; Francisco Velasco, en los teclados; María Camargo, en la voz; y Rodrigo Pratt, en el bajo y dirección artística. Lo más interesante de los compañeros de José Cruz, es que ninguno de ellos había nacido cuando a inicios de los años 80 se formó Real de Catorce.

Eso da un aire fresco a los temas de José, sin perder su esencia. Además, en este material, el charango de Erick Cárdenas, en Canción mil y El hambre; y el violín de Ulises Manuel Gómez Pinzón, en la Luna en los tinacos y en El Hambre, ayudan a redondear las ideas musicales y los arreglos del disco, realizados por la agrupación.

El diseño de Nación Blues también es digno de mencionarse. Desde siempre José Cruz ha sido muy cercano a la cultura huichola, convivió con ellos, vivió un tiempo con ellos y aprendió de ellos. En el diseño del booket -hecho por Hugo Mendoza-, retoma justamente elementos, figuras y colores de esta cultura; en la portada muestra, sobre un fondo negro, cuatro venados rojos, girando sobre una especie de sol, con elementos adicionales en azul.

Real de Catorce, la banda de blues mexicana más exitosa y longeva con la que cuenta nuestra escena bluesera está de vuelta con un excelente disco que contiene blues, rock y hasta pinceladas de jazz.

Cada encuentro que sostengo con José Cruz está lleno de emoción, gusto y placer; conversar con él es de lo más relajado y siempre tiene una sonrisa y buena cara. Ya lo hemos escrito en este espacio con anterioridad, José Cruz es un guerrero, un guerrero en pie de lucha; la adversidad lejos de amainar su ánimo, lo reta y saca la casta. Blues y luz para José y su Real de Catorce.