Blues a la Carta

Elvis, a 40 años de su muerte

“Elvis, el cantante blanco de blues

 más grande del mundo”

Joe Cocker

El pasado miércoles 16 de agosto (2017), se cumplieron cuatro décadas del fallecimiento del llamado “Rey del Rock”, Elvis Presley. Hoy tengo un espacio dedicado a él, por mi admiración y por su contribución a la cultura del blues, regresando de alguna manera lo que “tomó prestado” del género, para hacerlo popular a nivel mundial. El blues fue sin duda una de las influencias que conformaron su música.

Elvis y el blues

A diferencia de otros géneros musicales que influenciaron a Elvis, siempre pareció no haber ningún artista de blues que se destacara por su impacto como lo tuvo Elvis. En cambio, Elvis le dio un lugar preponderante al blues como género musical.

Big Mama Thornton, Arthur ‘Big Boy’ Crudup, The Prisonaires, Lowell Fulson, Chuck Berry, Bo Diddley, Little Richard, Fats Domino y muchos otros fueron admirados por Elvis quién grabó muchas de sus canciones, dejando huella en su música. La entrega y estilo tomado del género, es evidente en varias de sus grabaciones

Como se sabe, el blues se desarrolló en gran parte después de la guerra civil – principalmente, como una combinación de la música de los esclavos afroamericanos, de canciones relacionadas al ferrocarril y del góspel, apoyada por un beat de baile, entre otras corrientes reconocidas. Ese ritmo se hizo más notorio con el advenimiento del rhythm & blues. La letra de esas canciones, solían ser deprimentes, tratando las dificultades de la vida y las aflicciones del amor. También se sabe que hubo dos regiones y tipos principales de blues en norteamérica: el blues eléctrico (de guitarras), el Chicago Blues y el Delta Blues de la región del Mississippi caracterizado por el uso de armónicas y guitarras acústicas.

Creciendo en Tupelo, y posteriormente en Memphis, no es de extrañarse que el joven Elvis Presley rápidamente apreció la cruda emoción y la expresión personal que emana de la música del Delta blues. Elvis vivió junto a barrios de mayoría negra, por lo que aprendió a disfrutar del rhythm & blues negro, el jazz y el soul sin considerarlo ajeno a su vida como era costumbre en la época. Su familia estaba muy vinculada a la iglesia, sobre todo su madre, Gladys, y Elvis creció al son del góspel. En casa, Gladys también escuchaba música country y su hijo se aprendía enseguida todas las canciones.

Los estados del sur de los Estados Unidos habían sido durante mucho tiempo un hervidero de géneros musicales complementarios y diferentes: country, hillbilly, góspel y blues. Por otra parte, la década de los 50 fue una época de cambio racial. Cada vez más blancos y negros tocaban uno al lado del otro en los clubes y las estaciones “raciales” lentamente estaban incorporando la música del diablo (ritmos negros y blues), y se hicieron accesibles a la juventud blanca. Las historias de que Elvis iba a Beale Street, la legendaria cuna del blues, para escuchar a artistas como B.B. King, Little Junior Parker y Rufus Thomas, son bien conocidas.

El legendario B.B. King en su autobiografía menciona el encuentro con el joven Elvis en varias ocasiones y comenta la evidente fascinación de Elvis por la música de blues. Beale Street fue donde el llamado padre del blues, WC Handy (famoso por su St Louis Blues), comenzó a publicar canciones de blues alrededor del año 1912. Beale Street era una serie de clubes nocturnos y de otro tipo de lugares, donde los transeúntes podrían entretenerse durante toda la noche, como en los clubes que presentaban a artistas legendarios, y en la calle tocaban artistas de blues ambulantes.

Cindy Hazen y Mike Freeman señalan en su excelente libro ‘Memphis Elvis Style’ que Beale Street era un área donde los negros podían ir y socializar sin experimentar ninguna intimidación de los blancos, y Elvis debido a su amor por la música blues, es generalmente considerado como uno de los pocos blancos que visitaron ese lugar.

Karal Marling observa de manera perspicaz en su libro ‘Graceland Going Home With Elvis’, que debido a su papel de ‘liberar’ a los negros de las limitaciones de la mezcla con los blancos, Beale Street no sólo ofreció una escapatoria de los prejuicios, sino también “Que una persona, un artista, sólo podía ser juzgada por el talento”.

Fue en Beale Street que Elvis también escuchó a artistas menos conocidos como Calvin Newborn. Quien de hecho afirma haber enseñado a Elvis algunas cosas en la guitarra, mientras que otro promotor recuerda haberlo llevado al Men’s Improvement Club, para que viera a los músicos de blues.

En Memphis, Elvis escuchó el programa “Red, White and Blue” de Dewey Phillip en WHBQ. Phillips (como su contraparte de Sun Studios con el mismo apellido), ofreció un espectáculo que empujó los límites y permitió a los adolescentes (tanto blancos y negros) a ‘participar y mezclarse’. Para los jóvenes blancos, ésta era la avenida que necesitaban para escapar del conservadurismo tradicional de la música reverenciada por sus padres.

Por esos días Sam Phillips y Marion Keisker habían abierto en Memphis: Sun Records, un estudio de grabación dirigido sobre todo a músicos de raza negra. En ese verano de 1953 Elvis, que trabajaba de chofer en un camión, se presentó en el estudio para grabar algo y para que Sam le escuchara. Al poco tiempo, Sam lo llamó y lo puso a cantar junto a dos músicos expertos, el guitarrista Scotty Moore, y el bajista Bill Black. Esto era por supuesto coherente con el comentario frecuentemente comentado por Sam Phillips, de que él estaba buscando a un muchacho blanco con “el sonido y el sentimiento negro”. Después de muchos ensayos y grandes esfuerzos para coordinarse grabaron That’s Allright, Mama, un antiguo blues de Arthur “Big Boy” Crudup; Dewey Phillips puso esa canción y Blue Moon of Kentucky, como unas 14 veces en una noche. Mucha gente quedó impresionada y la estación se inundó con llamadas que pedían más temas de aquel cantante desconocido. Además, para sorpresa de Sam Phillips, la música de Elvis gustaba tanto al público blanco como al negro.

Que Elvis estaba fuertemente influenciado por el blues, era dramáticamente evidente, la acusación recurrente era que se le decía “el chico blanco que robó el blues”. Se puede argumentar que esta es una declaración simplista que ignora tanto la innovación que Elvis trajo a la música, como catalizador para transformar “una escena de música popular dominada por los sonidos ‘blanqueados’ de Perry Como y Frank Sinatra.

El legado de blues de Elvis nunca ha sido completamente examinado y generalmente es poco apreciado. Teniendo en cuenta la declaración de Joe Cocker de que Elvis era el cantante blanco de blues más grande del mundo, esto era un sarcasmo, y otro ejemplo de cómo el establishment de música en general se negaba a tomar en serio la carrera musical de Elvis.

Sorprendentemente, a pesar de la gran cantidad de material de “blues” grabado por Elvis, y la propensión de BMG/RCA a lanzar innumerables compilaciones de Elvis “Greatest hits” y “Love songs”, la compañía ha publicado muy poco blues de Elvis compilado. Aquí dejo dos listas musicales con un total de 55 temas, que es probable que genere debate, ya que varios títulos no serán considerados por muchos fans y críticos como canciones de blues… a cuarenta años de su muerte.

 Cultura Blues 76. Elvis Blues 1

Cultura Blues 76. Elvis Blues 2

Fuente:

–          https://www.elvisinfonet.com/blues.html

–          La vida de Elvis en imágenes. Marie Clayton. Parragón 2011

–          Historia del rock. Mark Paytress. Parragón 2016