La Poesía Tiene Su Norma

Así somos las mujeres

 Has callado mi boca
y no fueron con besos ni con caricias.
 
Has callado y limitado mi temperamento de mujer
has callado mi ser.
 
Has manoseado mi tiempo
 ojalá hubiera sido mi cuerpo.

 
Has mojado mi rostro de llanto
ojalá hubiera sido mi cuerpo de tanta excitación.
 
Has moldeado a tu modo mi mundo
has hecho un desfile de mujeres ante mis ojos
una gran pasarela, claro nivel de barrio.
 
 Callaste mis llamadas de amor
y hoy, prefiero no llamarte yo.
 
Me has subido al cielo
y luego, me has bajas al suelo.
 
Pero se te olvidó Lo principal...
moldear mi esencia, mi alma y mi espíritu.

Callar mi cuerpo mi aliento y mi tiempo
agarrar mi corazón y frenarlo...
¡Eso se te olvidó!
 
Y hoy ¡ja!... hoy soy la cínica y aferrada
en mi casa me llaman descarada.
 
Aunque yo me denomino
la natural que perdona y ama.
 
En pocas palabras digamos que soy
la que no sabe de censura.
 
La que habla y habla, por las miles de mujeres que callan.
Por las que quisieran plasmar a gritos literatura sin restricción.
 
Soy la representante de mis mujeres que como yo...
sólo aman con locura y por supuesto... con pasión.
 
¡Qué quieren!
así somos las mujeres.

 
Criticadas pero halagadas.
Deseadas y muchas veces…
atacadas entre nosotras mismas
con hormonas desatadas sin ser comprendidas.
 
¿Algo más que quieran agregarnos?
 
Poseemos una gran memoria,
 no se nos olvida lo que nos hicieron.

 
 Anotamos fecha, hora y a quién se lo escribieron.
Así que, olvidar que has callado mis labios
y no con besos ni con caricias
sino con decepción.
 
Que has limitado, manoseado, mojado,
moldeado mi cuerpo y corazón.
Eso te lo voy a archivar con fecha, hora y caducidad.
 
Porque así somos las mujeres de detallistas.

 
Esto era una carta que te escribía y resultó una reflexión para los dos.
Un recuerdo que de pronto a mi mente surgió.
 
Bueno, me despido...
¡Buenas noches… mi amor!
Tuff Times de Paul Brown – Álbum: The Funky Joint