Rita Guerrero
No tuve amistad con Rita Guerrero, acaso crucé palabra con ella un par de veces: la primera abriéndole un concierto a Santa Sabina en Torreón en el lejano 1998, y algunas otras en el Claustro de Sor Juana donde yo fui maestro y ella Directora del Coro que hoy lleva su nombre. No puedo negar, sin embargo, que sus primeros discos fueron pan de todos los días en mi adolescencia, y que su forma de cantar y su presencia escénica marcaron a una buena parte de mi generación. Hace un par de días fue su cumpleaños (22 de mayo de 1964–11 de marzo de 2011), y hoy comparto unos versos en su memoria.
Porque aún vive la cantante
en su acústico legado y el Azul Casi Morado de su voz no está distante. La luna en cuarto menguante gotea luz sobre el sendero, aunque el cuerpo es pasajero y una etapa transitoria persiste en nuestra memoria la voz de Rita Guerrero. |
Porque resuena en mi oído
todavía tu tesitura, porque la muerte es oscura pero no implica el Olvido. Por aquel Reino Perdido que no ha de volver jamás, porque sabías que la paz sin justicia es un placebo y en el silencio compruebo que aún Estando Aquí, No Estás. |
Porque aprendí de tu boca
que El Camino es el Deseo y el Ensamble Galileo todos los bienes evoca. Porque tu río desemboca en un mar hecho canción, porque la respiración es aire que sabe a jazz, cumplimos un año más con Rita en el Corazón. |
Nuevos versos de Frino cada martes en: www.cortandorabanos.blogspot.mx