Editorial

Si veinte años no es nada… cuarenta es el doble

Elvis Aaron Presley (8 de enero de 1935 – 16 de agosto de 1977).

Hace cuarenta años, Elvis oficialmente murió de un infarto masivo al miocardio a causa del uso excesivo de medicamentos prescritos, su voz hizo que mucha gente se enamorara entre sí, y de él; fortaleció el gusto por la música negra, sin que muchos percibieran su origen, es decir blanqueó la música negra, la hizo accesible al público que de entrada despreciaba a los autores, Big Boy Cudrup, Chuck Berry, Big Mama Thornton y muchísimos más, por el mero hecho de ser negros.

En agosto de 1953, Elvis ingresó por primera vez en las oficinas de Sun Records con la intención de pagar unos minutos de estadía en el estudio para grabar un disco de acetato de doble cara: My Happiness y That’s When Your Heartaches Begin.

Afirmó que el disco sería un regalo para su madre, o que simplemente él estaba interesado en ‘cómo sonaría’. El biógrafo Peter Guralnick opina que, eligió a la compañía Sun Records con la esperanza de ser descubierto. Tras la grabación, el jefe de la compañía discográfica, Sam Phillips, le pidió a la recepcionista Marion Keisker que escribiera el nombre del joven, cosa que hizo junto a un comentario personal: «Buen cantante de baladas. Retener».

Sam, buscaba a alguien que pudiera rescatar el sonido de los músicos negros para hacerlo llegar a un público más amplio. Marion Keisker comentó: «Recuerdo a Sam decir una y otra vez: ‘Si pudiera encontrar a un blanco que tuviera un sonido negro y un sentimiento negro, podría hacer mil millones de dólares’».

En efecto abrió el oído para popularizar la música que estuvo dirigida a un público muy especial, los negros, su voz la hizo accesible y la internacionalizó y mostró la ruta para el resurgimiento de los grandes maestros del blues, encabezados por los grupos ingleses durante los años 60 y así, estos seguidores, hicieron uso y dieron el crédito merecido al talento y enviarían regalías a los autores originales.

La voz

Un cantante o vocalista es un artista que produce con su voz sonidos melodiosos, normalmente utilizando palabras que suelen rimar. Es el personaje privilegiado del concierto, es el centro de atención por innumerables razones y si a eso se agrega una buena voz, el éxito es instantáneo.

En la voz humana se distingue entre la tesitura y la extensión vocal. La extensión vocal, es decir, la extensión sonora de la voz es el marco de frecuencias realizables, sin considerar volumen y calidad del sonido. En voces sanas, comúnmente es de dos octavas o más.

El término tesitura se usa para denominar la parte de la extensión vocal en la cual se pueden realizar sonidos controlables y utilizables musicalmente. Las características para definir la tesitura de una voz son:

Un buen timbre, un volumen considerable, un vibrato igualado, la posibilidad de un messa di voce, la posibilidad de agilidad y coloratura. Las tesituras de cantantes profesionales en ópera deben ser de dos octavas o más; en tenores, un poco menos de dos octavas.

Para clasificar voces para el uso coral, se distinguen cuatro grupos principales, cuya tesitura es menor que dos octavas, para poder incluir voces menos preparadas: soprano: de do4 a do6, contralto: de mi3 a mi5, tenor: de do3 a do5, bajo: de mi2 a mi4, mezzosoprano (entre la soprano y la contralto): de la3 a fa5, y barítono (entre el tenor y el bajo): de sol2 a mi4.

En el blues las voces tanto de hombres como de mujeres son más complejas, son ásperas, con un gran volumen, llenas de armónicos, con un tempo impecable, su timbre es único y totalmente personal, que las y los identifica desde la primera nota, son ingeniosos, vitales, sus letras van llenas de juegos de palabras y cargadas de picardía, generalmente con temáticas sexuales.

¿Nombres?, la lista es inagotable y cualquier intento sería injusto, que cada quién haga su lista, pero siempre encontraremos y escucharemos algo nuevo en las voces de ellos, así los hayamos escuchado una o mil veces.

 


 

El número 76 de septiembre de 2017, tiene como temas destacados: Elvis a 40 años de su partida, la voz y sus intérpretes; y el fino testimonio gráfico del blues hecho en México; entre muchas otras cosas.

En la Portada un micrófono clásico que representa la voz en en el blues-jazz-rock, abre la puerta de la nueva edición. De esa manera, el tema de ‘Elvis Presley a 40 años de su muerte’, se menciona en el Editorial, en Blues a la Carta e indirectamente en ¿Quién lo Hizo?, en donde se presenta una breve semblanza del “Coronel” Parker, manager del llamado “Rey del Rock”. Shuggie Otis, cantante y guitarrista, es entrevistado en Planeta Blues. Un cantante muy peculiar del Delta blues, Charley Patton, aparece en la interesantísima columna, Lado B. La voz en el ámbito nacional también se hace presente, con las entrevistas de Huella Azul a Fonzeca y a Freddie Maguire.

En relación con el blues internacional, este número contiene una reseña de un espectacular concierto llevado a cabo en 1989: ‘Una Celebración de Blues y Soul’. En Video: comentamos dos nuevos de la gira más reciente (2016), de los legendarios Rolling Stones: Olé Olé Olé!: A Trip Across Latin America y Havana Moon. Tenemos la lista de ganadores de los premios a lo mejor del blues 2017, según la revista especializada de Chicago: Blues Blast Magazine. La acostumbrada recomendación de los discos de reciente publicación, y su play list con más de 30 piezas. Y finalmente, la tercera parte de la lista de 100 temas de blues fundamentales recomendados por el músico de jazz y escritor: Ted Gioia.

El fino y breve testimonio de la escena nacional, está en las amplias galerías fotográficas, destacándose en esta ocasión, lo sucedido en el 4º Festival Nacional Queretablues, pero también está Perikles y La Impredecible Blues, Tomy Espósito Blues Band, Jaime López, Iraida Noriega y Las Señoritas de Aviñón. Un extraordinario artículo acerca del primer disco del Three Souls In My Mind.

La edición se engalana y complementa, con el artículo acerca de los programas radiofónicos de nuestro colaborador Yonathan Amador, con el de: ‘Oye: ¿Cómo puedo aprender a tocar Blues’ de Juan Carlos Cortés; el texto poético ‘Fidelidad’ de Norma Yim; y en la Agenda, la programación del Primer Festival Internacional de Jazz en la Huasteca.

José Luis García Fernández

1 de septiembre de 2017