De Blind Raccoon

Frank Bey: All My Dues Are Paid

Frank Bey – All My Dues Are Paid (enero de 2020).

Frank Bey, regresa con su sexto álbum y el segundo en el sello discográfico, Nola Blue, entregando un convenio sobre paz, amor, empoderamiento y comprensión. All My Dues Are Paid es una colección de 13 canciones de glorioso blues, funk y soul que muestra la poderosa voz y la visión del mundo siempre positiva de Bey. Colaboró con Kid Andersen y Rick Estrin en los estudios Greaseland en San José, California, junto con un elenco de músicos estelares para lo que Bey describe como “uno de los mejores álbumes que ha grabado“.

Lista de canciones. 1. Idle Hands; 2. One Of These Days; 3. Calling All Fools; 4. It’s A Pleasure; 5. All My Dues Are Paid; 6. He Stopped Loving Her Today; 7. I Bet I Never Cross Your Mind; 8. Never No More; 9. Ha Ha In The Daytime; 10. If It’s Really Gotta Be This Way; 11. Perfect Day; 12. One Thing Every Day; 13. Imagine.

Frank Bey en sesión de grabación en Greaseland

La obra comienza con una versión de Idle Hands, un tema escrito por Eddie Palmieri y Harlem River Drive, el prototipo de un Latin Soul Fusion. La sección de metales enfatiza cada punto de la lección de historia de los derechos civiles, y Bey nos desafía a todos a que nos importe un comino. Luego sigue una canción original de Billy T Band, One Of These Days, un ejemplo del soul que aprendió mientras crecía en Georgia, aquí con Lisa Leuschner Andersen haciendo eco de sus líneas con dulces voces de coro y con Jim Pugh tocando el piano Wurlitzer y el órgano B3, generando un suave groove.

El coproductor Rick Estrin trajo al álbum la melodía de los Nightcats, Calling All Fools, agregando metales y teclados al ritmo acompasado de buen blues. The Sons Of The Soul Revivers, se unen a Bey con voces de acompañamiento en la primera de las dos versiones del autor “Mighty” Mike Schermer. En It’s a pleasure, Frank le agrega intensidad a la alegre canción de R&B moderno.

Bey colaboró con Kid Andersen, Rick Estrin y con el trovador de Texas, Kathy Murray, para escribir el título autobiográfico, All My Dues Are Paid. Un ardiente blues soul de Memphis que lo encuentra mirando hacia atrás en su vida y a aquellos que intentaron disuadirlo, pero audazmente declara: “no sabían, que no hay forma de detener a Frank Bey, es mi momento de brillar”.

Bey demuestra su profundidad al cantar la que se considera, una de las mejores canciones de country de todos los tiempos, He Stopped Loving Her Today, poniendo su propia marca en el estándar de George Jones. Nancy Wright se pone en el saxofón para interpretar otra melodía de los Nightcats, I Bet I Never Cross Your Mind, que saborea perfectamente el blues jazz estilo cabaret, para que coincida con las voces a la manera de Louis Jordan.

El primero de dos estupendas piezas del catálogo del “poeta laureado del blues”, Percy Mayfield, es el estruendoso blues jump de 1962, Never No More, entregado con fuego auténtico y un gran arreglo impulsado por la sección rítmica de Paul Olguin en el bajo y el baterista Paul Ravelli, junto con el tecladista de los Nightcats, Lorenzo Farrell y, por supuesto, Kid Andersen en la guitarra, además de una sección de metales calientes. La segunda pieza, es una canción muy popular de la reconocida compositora de blues, Ha Ha In The Daytime. Escrita durante el tiempo en que Mayfield estaba trabajando para Ray Charles, este sencillo blues rinde homenaje a ambos íconos.

Luego enciende una luz sobre otro cantante a menudo ignorado, el pionero del soul country, Arthur Alexander, con una versión inmortal de la canción de amor sentimental, If It’s Really Got To Be This Way, que grabó por primera vez antes de su prematura muerte en 1993, poco después de ser incluido en el Salón de la Fama de la Música de Alabama. Bey rinde homenaje a otro héroe, Lou Reed, con la balada para piano, Perfect Day, una poderosa balada alimentada por el góspel.

Luego continúa su sermón sobre el alegre, One Thing Every Day, alentándonos a todos a hacer del mundo un lugar mejor. Toda la amplitud del poder artístico y emocional de Bey se ve reflejada en el dinámico arreglo a Imagine, de John Lennon, que se convierte en un glorioso gran final.

Frank Bey – All My Dues Are Paid

Frank Bey – Imagine