Blues a la Carta

Larkin Poe… ¡magnífica y explosiva!

Las hermanas Rebecca y Megan Lovell de Larkin Poe son cantantes, compositoras, y multi-instrumentistas, que han venido creando su propio estilo: rock blues y música de raíz estadounidense. Son originarias de Atlanta, Georgia y actualmente residen en Nashville, curiosamente son descendientes de Edgar Allan Poe, escritor, poeta, crítico y periodista romántico, generalmente reconocido como uno de los maestros universales del relato corto, recordado especialmente por sus cuentos de terror.

Con fuertes armonías sureñas, riffs pesados de guitarra eléctrica y guitarra slide, a menudo son promocionadas como “las hermanas pequeñas de los Allman Brothers”. La banda con Rebeca Lovell en la voz, guitarras, banjo, violín, y piano; Megan Lovell: coros, lap steel, y dobro; actualmente se complementa con Tarka Layman en el bajo y Kevin McGowan en la batería.

Han tenido en los últimos años exitosas presentaciones como en el Festival Glastonbury de 2014 y 2016, y fueron elegidas como “Mejor descubrimiento de Glastonbury 2014” por The Observer del Reino Unido. También actuaron espectacularmente en el Festival de Blues de Chicago de 2019.

Su discografía esencial incluye los álbumes: KIN (2014), Reskinned (2016), Peach (2017), Venom & Faith (2018) y su más reciente; Self Made Man (2020). Justamente, de este reciente álbum publicado apenas el pasado 12 de junio, es de quién haremos la reseña, en este artículo, dedicado a esta… ¡magnífica y explosiva banda!, que ha venido y seguirá seguramente, dando mucho de que hablar.

Self Made Man

01: She’s A Self Made Man. Desde las primeras notas de las guitarras explosivas y las voces expresivas, de la pista inicial se percibe el característico estilo de las hermanas Lovell, que han venido adquiriendo desde su disco, Peach, del 2017. Ellas, como en el título de la canción, están triunfando por méritos propios. Con un ritmo incansable en sus actividades artísticas.

02: Holy Ghost Fire. La potencia en el sonido de esta pieza pop rock, no decaé en ningún momento. Siempre tocando, cantando y actuando con ese actitud enérgica y ardiente que contagia.

03. Keep Diggin’. Con esta tercera canción, fácil se completa una buena trilogía de poderosos temas, con las guitarras estridentes y las voces con coros punzantes y definitivos para levantar el ánimo a cualquiera, en estos tiempos de cierta manera desoladores.

04: Back Down South. Un grito nostálgico por el regreso a casa, hacia el sur. Muestra un espectacular solo de guitarra slide, respaldado por el resonador, en un par de estupendas interpretaciones.

05: Tears Of Blue To Gold. El compás marcado por las palmas mantiene un ritmo rocanrolerito a lo largo del tema, que con cierta nostalgia se pasea entre un sonido pop moderno y un rock que me recuerda en pasajes vocales a los Beach Boys, con la diferencia de las notas del sello de la casa, de la ‘lap steel’ a todo lo que da.

06: God Moves On The Water. Intro con riffs de guitarra que se mantienen de cierta manera a lo largo y ancho de la pieza. Moviéndose como pez en el agua. Como lo hace el Creador, en las cosas buenas y malas de la vida.

07: Every Bird That Flies. Un blues rock lento se pasea misterioso descubriendo el motivo y razón por la que cada pájaro vuela. De nuevo un espectacular solo de guitarra slide, sorprende por su tonelaje de buena interpretación.

08: Scorpion. Un sencillo riff con un efecto muy especial que revolotea por todos lados mantiene el interés por este rock sencillo, pero altamente efectivo.

09: Danger Angel. Un poquito de folk rock marcado por el banjo, y con el ensamble de voces característico de Rebecca y Megan, hacen de esta pieza aparentemente sencilla, en una pieza de llamar la atención.

10: Ex-Con. Nos encontramos ahora ante una pieza country rock, con destellos de góspel; sin embargo, los modernos sonidos eléctricos y poderosos, la convierte en un tema vigoroso y cautivador.

11: Easy Street. Un bluessgrass para el final, da como resultado el que notemos que la obra en general hace un recorrido por diversos estilos muy característicos de la música estadounidense. Al que se le suman los géneros de los temas anteriores, como el blues, rock, pop, country, góspel, folk, bluegrass.

Sin duda, un buen disco que probablemente, logre mejores resultados que Venom & Faith (2018), que las llevó a obtener nominaciones al Grammy y a los premios Blues Music Awards. Bueno, eso digo yo. Ya veremos.