Tributo

Graná Louise in memoriam

La Esquina del Blues y Otras Músicas: Graná Louise in memoriam

El 13 de junio un escueto comunicado de la disquera Delmark confirmó el fallecimiento de una de las más importantes y privilegiadas voces del blues de Estados Unidos: Graná Louise. Esta carismática artista recorrió innumerables escenarios de Estados Unidos y Europa. Fue heredera de Koko Taylor, Etta James, Denise Lasalle, Billie Holiday, Ruth Brown, Bessie Smith, y de la misma Tina Turner. Tenía una fuerza, un estilo y personalidad propios.

La primera vez que se presentó en México fue el 18 de mayo de 2006 en el Bar Ruta 61, escenario en el que desfilaron durante varios años, una constelación de grandes estrellas del blues internacional. En Chicago, Graná llevó una vida muy activa en los mejores bares de blues de esa ciudad: el Blue Chicago, el Buddy Guy’s Legends, el Andy’s Jazz Club, el Shaw’s Crab House (en su Oyster Bar), el Redfish, el Koko Taylor’s Celebrity, el Kingston Mines, pero también fue conocida y disfrutada en México.

Cada vez que subía al escenario, Graná ofrecía una noche de sorpresas y descubrimientos, de sensualidad, amor, pasión, alegría, llanto y ternura bluesera. Conquistó a México en mayo de 2006 y en reciprocidad, ella se comprometió con los mexicanos a ofrecer su corazón. De su pecho brotaba su voz de terciopelo y en sus labios, su sonrisa carismática hipnotizaba a la audiencia. Y no sólo lo hizo en la Ciudad de México. También fue invitada al Festival Internacional de Jazz y Blues de Zacatecas, donde su derroche de coquetería, robó el corazón de ese público en el año 2008.

Entre sus discos y colaboraciones pueden señalarse: Hit The Big Time (1998), Mojo Mamas (2000), Wild About That Thing (2003), Generations (2003), Getting Kinda Rough! (2011).



Pero más allá de sus interpretaciones a piezas de su autoría como, It´s another workday, así como de otros deliciosos blues, Little red rooster de Willie Dixon y Big fat daddy, de Irene Reed y en terreno jazzístico, el Summertime de Gershwin.

Graná Louise transmitía sus emociones de una manera tal que el blues trascendía y haría que nunca más volviera a ser escuchado igual. Algo en su voz conectaba fibras en el corazón y el alma y le confería una nueva dimensión, y aquella frase que habla del blues como un estilo de vida, adquiría sentido y se enraizaba en quien la escuchaba, gracias a ella.

Adiós Graná Louise, queda en la memoria de tus fans, tus brillantes interpretaciones. Tu dulzura, tu femineidad, y sobre todo tu enorme admiración por Jimi Hendrix y el tributo que le rendías cuando cantabas, Hey Joe.

¡Qué el cielo te reciba con gran alegría!


Graná Louise and the French Blues Explosion