Tinsley Ellis: Devil May Care
Capítulo 2: Tinsley Ellis – Devil May Care (Alligator Records ALCD 5008 – 2022)
Tinsley Ellis nació en Atlanta en 1957, se crió en el sur de Florida. Adquirió su primera guitarra a los siete años, poco después de ver a The Beatles actuar en el Show de Ed Sullivan. Se acopló al instante, desarrollando y perfeccionando sus habilidades a medida que crecía. Descubrió el blues por la puerta trasera de bandas de la invasión británica como The Yardbirds, The Animals, Cream y The Rolling Stones, así como de rockeros sureños como The Allman Brothers. Una noche de 1972, él y un amigo estaban escuchando el disco, Super Session de Al Kooper y Michael Bloomfield cuando el hermano mayor de su amigo les dijo que si les gustaba, deberían ir a ver a B.B. King, que estaba en la ciudad esa semana.
Tinsley y sus amigos fueron a la presentación del sábado por la tarde, estuvieron sentados y paralizados en la primera fila. Cuando B.B. rompió una cuerda de su guitarra, Lucille, la cambió sin perder el ritmo y le entregó la cuerda rota a Ellis. Después del espectáculo, B.B. salió y habló con los fans, cautivando a Tinsley con su calidez y amabilidad. El destino de Tinsley ahora estaba sellado; tuvo que convertirse en guitarrista de blues. Vio a Howlin’ Wolf, Muddy Waters y todos los demás artistas de blues que pasaban por la ciudad, siempre sentado hasta el frente, siempre esperando a conocer a más artistas, tomar fotos y obtener autógrafos. Hasta el día de hoy, todavía dice tener la cuerda de B.B.
Devil May Care, es el vigésimo álbum de Ellis, contiene diez de sus composiciones originales más dinámicas, mezclando rock ‘n’ roll vigoroso y blues pesado, consiguiendo su propio sonido, ahora ya reconocible al instante. La lista de canciones es: 01. One Less Reason; 02. Right Down The Drain; 03. Just Like Rain ; 04. Beat The Devil; 05. Don’t Bury Our Love; 06. Juju; 07. Step Up; 08. One Last Ride; 09. 28 Days; 10. Slow Train To Hell.
El disco inicia de manera inmejorable con tres temas que muestran tintes de rock sureño: One Less Reason, la primera de ellas con un gran ritmo y enmarcada con riffs de guitarras entrelazados, ¡estupenda! Enseguida, Right Down The Drain, continua el ritual, sin dejar un momento de mantener la potencia, energía y el ritmo en la interpretación impecable del tema. Just Like Rain, la tercera es una balada tranquila, pero con la magia de Tinsley y la banda.
Los solos de guitarra cargados de emociones, se elevan al servicio completo de las canciones, como si Ellis estuviera viviendo y respirando el sonido en lugar de simplemente tocar las notas. Beat The Devil, otro rock blues que destila calidad, en tonos menores y con mucho del estilo de la vieja escuela. Don’t Bury Our Love, se trata de un excelente blues lento, igual, con todos los ingredientes necesarios para cocinar algo que da como resultado un platillo sumamente rico. Juju, el rock con sabor latino se presenta en esta buena pieza adornada con una guitarra slide.
Tinsley Ellis – 28 Days – Slow Train To Hell
Step Up, un tema donde aparece el funk, que también es parte del estilo de Ellis y su banda. One Last Ride, el rock sureño regresa a escena, logrando la delicia y disfrute de los oyentes, sin duda. Para el final del disco, del que Ellis dice que “es tanto para los fanáticos como para mí’, dos grandes temas: 28 Days, una pieza de rock blues con todo su apasionante estilo, que me ha convencido para considerarlo fácilmente como un material exitoso y digno de premios. Slow Train To Hell, un blues lento para el lucimiento de la guitarra de este músico fuera de serie. Una joya en el catálogo del legendario sello discográfico.
