Especial de Medianoche

Sesiones de un disco inolvidable

Fleetwood Mac in Chicago

Uno de los discos más icónicos en donde colaboraron los maestros afroamericanos del mejor blues eléctrico de los años sesenta, con sus jóvenes alumnos y seguidores británicos, es sin duda el Fleetwood Mac in Chicago. Grabado en el mes de enero de 1969, para el sello discográfico, Blue Horizons Records, el grupo estaba integrado por: Peter Green en guitarra principal y voz, Jeremy Spencer en el slide, Danny Kirwan en guitarra de acompañamiento, John McVie al bajo y Mick Fleetwood en la batería.

Las leyendas de Chess que los acompañaron fueron: Otis Spann al piano, Willie Dixon al contrabajo, Walter Horton en armónica, J.T. Brown al sax, S.P. Leary en la batería, y como guitarristas invitados, Buddy Guy y Honey Boy Edwards.  También Lucille Spann tiene una breve participación. A continuación reproduzco tres interesantes testimonios sobre este importante álbum doble, el cual también ha añadido bonus tracks en su versión digital en cd.

Mike Vernon (productor):Fleetwood Mac iba a ir a Estados Unidos y tenía que grabar en Chicago, tenía esa idea fija, metida todo el tiempo. Así que pensé que era una oportunidad de oro para ingresar al estudio de Ter-Mar, que era el hogar de Chess. La idea era grabar una sesión improvisada con algunos de los músicos más conocidos de ahí. En ese momento me coordiné con el gran Willie Dixon para que armara un grupo de ensueño, grupo que, finalmente, es el que ustedes pueden escuchar. Lo malo fue que Buddy Guy estaba atravesando por alegatos legales con los hermanos Chess, y por ello su participación es mínima. Asimismo, si hubiéramos podido incluir a algunas otras de las persones de mi lista, figuras como Otis Rush o Magic Sam, habría sido un disco más espectacular. El primer baterista que pensé fue Odie Payne, pero no estaba disponible.

La idea le encantó a mis representados, pero tenían algunas dudas sobre la calidad técnica de los estudios, los imaginaban como viejos y desvencijados, pero la realidad les demostró lo contrario. Eran mucho más grandes y más profesionales de lo que ellos esperaban. También por ser época invernal, teníamos mucho frío. Si algo caracterizó el comienzo de las grabaciones fue el ambiente relajado y el buen humor. Eso se nota en términos generales en el disco, sin embargo, hubo momentos complicados.

El veterano armonicista Walter “Shakey” Horton, es un ejemplo al respecto. Al principio estaba bien, pero luego comenzó a beber y empezó a ser autoritario y a generar problemas. Dixon tuvo que intervenir para calmarlo. Por lejos, la mejor de las cosas llegó al final de las sesiones, cuando Fleetwood Mac grabó, Watch Out y Homework, dos pistas pendientes. Quizá intuían que el final de una aventura especial estaba próximo y por eso la banda se escucha absolutamente suelta. Dijeron: “correcto, tenemos 20 minutos y lo vamos a hacer ahora“’.



Jeremy Spencer:Guardo un cariño especial por Fleetwood Mac en Chicago, donde tuvimos la fortuna de tocar con un grupo de incomparables exponentes como Otis Spann, Big Walter Horton, Willie Dixon, Buddy Guy y otros. Dixon, quien se encargó del contrabajo, era el “gran jefe del blues ahí”, siempre se condujo con enorme diplomacia. Yo destaco la amistad que surgió con J. T. Brown, quien había sido saxofonista de Elmore James. Como muchos de ustedes saben, es mi principal influencia en el slide, por lo tanto, Brown representaba al caballero de la vieja escuela, cortesía y clase, unidos. Él y yo nos divertimos tocando juntos. Él era como un abuelo para mí y parecía disfrutar de la novedad de este pequeño “blanco” sesentero cautivado por su música.

Tomábamos café en los descansos y charlábamos principalmente sobre Elmore, por supuesto, y no parecía importarle. Unos nueve meses después de esa grabación, J.T. me habló a Londres desde Chicago. A través de la bocina del teléfono puso el sonido de un disco de 78 rpm, se trataba de “Coming Home” de Elmore James. Dijo que por esos días Elmore se había accidentado. Estuvo un tiempo en el hospital, y que esos días en recuperación le habían afectado los dedos. Aun así se las arregló para efectuar las grabaciones siguientes, entre las que destacaba el tema el “Niño de doce años”. Unos tres meses después, J. T. murió. Estaba “Volviendo a casa”’.



Peter Green:En el año en que se hizo esta formidable grabación, yo tenía a varios guitarristas americanos como mis principales influencias: Otis Rush, Buddy Guy (quien nos acompañó brevemente en el estudio), Freddie King y J. B. Lenoir. Pasé por una fase de B.B. King muy al comienzo de mi carrera. De todo ellos aprendí cosas valiosas, también de Eric Clapton. Sobre quienes me catalogan como uno de los grandes héroes de la guitarra británica de todos los tiempos, no creo que califique en ese rubro. Cometo demasiados errores. Pero hubo un momento en que no cometí ninguno, cuando sólo tocaba por amor y por divertimento’.



Aprovecho para desear un feliz aniversario a la revista digital Cultura Blues y a su enorme legión de seguidores.

¡Felicidades y que vengan muchos años más!