Stevie Silver – Cruisin’
De aquí, allá, y de todas partes XLI. Stevie Silver – Cruisin’ (Estados Unidos/Japón)
Después de una pausa, regresamos con más material compartido a Cultura Blues, en esta ocasión fue mediante un mensaje que decía… “Hola, me llamo Stevie Silver. Anteriormente músico de blues del área de Boston durante los últimos 30 años, recientemente me mudé a Kioto, Japón, y estoy avanzando aquí con mis presentaciones. Actuaré en el escenario principal del Sakai Blues Festival, el festival de blues más grande de Japón, este octubre (2025).
A finales de los 80, fui mentor del gran bluesman Ronnie Earl. Mi nuevo álbum, Cruisin’, salió el mes pasado (junio 2025) y fue producido por Duke Robillard. Tuve el placer de contar con la ayuda de Doug James de la Jimmie Vaughan Band; Sugar Ray Norcia de Sugar Ray and The Bluetones; Marty Ballou y Mark Teixeira de The Duke Robillard Band; y Dave Limina de Ronnie Earl and The Broadcaster. Les agradecería mucho si pudieran escuchar el álbum en Spotify (también disponible en iTunes) y quizás escribir una reseña en Cultura Blues”.
Y bueno, para entrara en contexto comencemos con una semblanza de este artista, Stevie Silver, publicada en su página oficial… “Me considero afortunado no solo de haber crecido en una época en la que la música estaba cambiando y madurando, sino también de vivir en una zona donde vivían y tocaban muchos músicos maravillosos y talentosos. Actualmente, además del blues, me estoy sumergiendo profundamente en el rock and roll de raíces y el rockabilly. Mi banda actual, Stevie Silver and The Rhythm Wolves, toca las primeras grabaciones de Sun Studio de Elvis Presley, Carl Perkins y Jerry Lee Lewis, así como de otros grandes del rock and roll como Gene Vincent, Eddie Cochran, Buddy Holly, Bill Haley, Duane Eddy y The Ventures, por nombrar solo algunos.
Como tantos otros de mi generación, mi amor por la música comenzó de muy pequeño con la actuación de los Beatles en el programa de televisión de Ed Sullivan en 1964. Estaba tan enamorado de los Beatles que me escabullí a Boston solo, sin decirles a mis padres, para comprar unas botas de los Beatles. Trabajé todo el verano lavando platos para ganar suficiente dinero y comprar mi primera guitarra: una Rickenbacker Sunburst Modelo 360, igualita a la de George Harrison.
Mis horizontes musicales se ampliaron bastante en el club nocturno The Boston Tea Party, en la calle Berkeley de Boston, a finales de los 60. Allí descubrí a muchas bandas y músicos famosos, y otros que pronto lo serían, como The Who, Mountain, Jethro Tull, Ten Years After y Eric Clapton. A veces pagaba solo 3 dólares por un asiento en una almohada a un metro y medio delante de Pete Townsend y Roger Daltry, que balanceaba su micrófono sobre mi cabeza. En serio… ¿cómo superar eso?
Mi amor por la música me llevó a descubrir el blues en los 70, cuando vi al gran Muddy Waters en el Paul’s Mall de la calle Boylston de Boston. Este fue el comienzo de mi pasión por el blues, que continúa hasta el día de hoy. Muddy Waters dijo la famosa frase: «El blues tuvo un hijo y lo llamaron rock ‘n’ roll». El rock ‘n’ roll de raíces y el rockabilly son pasiones paralelas para mí, ya que crecí escuchándolos en mi radio de transistores en la adolescencia.
A finales de los 80, con la inauguración del Nightstage en Cambridge, hubo un desfile continuo de artistas maravillosos casi cada fin de semana para satisfacer mi inagotable ansia de nuevas experiencias musicales. Desde jazz (Jimmy Smith, John McLaughlin, Dizzy Gillespi), hasta blues (Albert King, Albert Collins, Clarence Gatemouth Brown, Robert Jr. Lockwood), sin olvidar a maravillosos artistas locales como Duke Robillard, Sugar Ray and the Bluetones y David Maxwell.
Fue en esa época cuando vi por primera vez a Ronnie Earl, quien había tomado el lugar de guitarrista de Duke Robillard con su banda Roomful of Blues, en una actuación en Nightstage. Nunca había visto a un guitarrista tocar con tanta pasión y alma, y en ese mismo instante decidí que tenía que conocer a Ronnie e intentar descifrar el secreto para tocar la guitarra así. Con mucha suerte y algo de determinación, finalmente logré reunirme con Ronnie semanalmente durante ese año, en su pequeño apartamento en Waltham, para aprender algunos fundamentos.
Pasábamos muchas horas en su sofá tocando blues y escuchando su colección de discos. A veces, el virtuoso de la armónica Jerry Portnoy, que vivía arriba, nos acompañaba en nuestras improvisaciones. Le estoy eternamente agradecido a Ronnie por tomarse el tiempo para guiarme en el camino correcto.
Conocí a muchos otros artistas maravillosos gracias a mi relación con Ronnie: Albert Collins, Wayne Bennett, Duke Robillard, David Maxwell, Sugar Ray Norcia, Anson Funderburgh, Sam Myers, Jimmie Vaughan y Stevie Ray Vaughan… ¡qué músicos tan maravillosos y talentosos! Cada una de estas personas amplió mi aprecio por el blues y algunos incluso me dieron consejos o me dieron algo nuevo que aprender con mi instrumento.
Tengo gratos recuerdos de recibir a Ronnie y Wayne Bennett en mi casa, de hablar con Jimmie Vaughan sobre sus influencias en su camerino en Lupo’s, de reírme un poco con Hubert Sumlin durante la sesión de grabación del álbum Healing Feeling de Ronnie, y de estar en el pasillo entre bastidores de Great Woods (ahora el Comcast Center) con Stevie Ray Vaughan hablando de nuestro mutuo amor por la música de Jimi Hendrix. Quiero agradecerles a todos su generosidad.
Este fue un viaje que comencé hace más de veinte años. Me siento verdaderamente bendecido y agradecido por haber podido conocer y estar cerca de artistas tan maravillosos. Continúo este viaje y esta historia de amor no solo con el blues, sino con todo tipo de música a diario, y espero seguir creciendo musicalmente y como persona en el futuro. Espero que se unan a mí y a otros músicos para que juntos podamos aportar algo de luz a nuestro mundo”.
En cuanto a su nuevo disco Cruisin’ que nos comparte Stevie Silver, se trata de un extraordinario material que contiene todos esos estilos que nos comenta en su semblanza: rock and roll, rhythm and blues, blues, rockabilly, etc., en 12 maravillosos temas: 01. Cruisin’; 02. Red Hot (con Duke Robillard); 03. Saturday Night (con Duke Robillard); 04. Apache (con Duke Robillard); 05. Rip It Up; 06. Aces & Eights; 07. Gimmie, Gimmie; 08. Rockabilly Boogie; 09. Racing with the Devil (con Duke Robillard); 10. Summertime Blues (con Duke Robillard); 11. Sleepwalk (con Duke Robillard); y 12. Wild Child (con Duke Robillard).
¡Muchas gracias, Stevie por compartirnos esta información y buen material!
